jueves, 22 de julio de 2010

El balizamiento del Piedras se modificara tras el dragado

Dentro del marco del desarrollo del Plan de Usos de los Espacios Portuarios de la Ría del Piedras aprobado en agosto de 2009 por la Consejería de Obras Públicas y Transportes de la Junta de Andalucía, la Agencia Pública de Puertos de Andalucía -APPA-, ha sacado a licitación el mantenimiento del balizamiento de la nueva canal de acceso al río Piedras al objeto de mantener actualizada la señalización y hacer más segura la navegabilidad en el mismo.

Un balizamiento que como consecuencia del dragado de la desembocadura del Piedras que se está llevando a cabo dentro del marco de dicho plan, tendrá que ser reubicado a unos 1.500 metros al oeste del actual. Y es que con motivo del dragado, la canal de acceso al río Piedras actualmente en uso, que ya no cumple las condiciones necesarias para su uso de forma desahogada por su escaso calado, que impide el tránsito de embarcaciones durante la bajamar, va a cambiar de ubicación. En este sentido, el actual emplazamiento, que discurre en paralelo al curso del Piedras hasta bien entrado en el término municipal de Punta Umbría, concretamente hasta el desagüe de la laguna de El Portil en el mar, donde gira 90 grados en dirección hacia alta mar, va a ver alterado su recorrido entre los próximos meses de agosto y septiembre, fecha en la que está prevista la finalización del dragado, por lo que este mismo giro se producirá unos 1.500 metros antes, justo entre los términos municipales de Cartaya y Punta Umbría.

Para ello, según ha destacado el director de las obras de dragado de la canal de acceso, el ingeniero José María Tejero, "habremos extraído al final de los trabajos cerca de 200.000 metros cúbicos de arena en una de las zonas con la hidrodinámica marina más cambiante del litoral español debido a los movimientos de arena que se producen continuamente en la desembocadura del Piedras, al imparable crecimiento de la flecha y a la constante formación de dunas mesomareales o sumergidas que provoca lo anterior".

El objetivo, según Tejero, es que la nueva canal que se está abriendo, tenga como mínimo tres metros de calado durante la bajamar "a fin de garantizar la navegabilidad y el acceso al Piedras de todo tipo de embarcaciones pesqueras y de recreo, independientemente del estado en que se encuentre la marea en cada momento". Para ello, la nueva canal contará además con una anchura aproximada de 32 metros y una longitud de 1,3 kilómetros, "que deberán ser correspondientemente balizados para permitir una navegación segura por parte de las embarcaciones".

El servicio que la APPA saca ahora a licitación para el mantenimiento del balizamiento, cuyo plazo para la presentación de ofertas finaliza el lunes 26 de julio, se centran en la conservación e inspección de la señalización marítima y el balizamiento en la vía de navegación del río Piedras. La duración del contrato para este mantenimiento es de dos años, prorrogables por otros dos, contando con un presupuesto base de licitación de 92.800 euros, que asume el organismo público de puertos de Andalucía.

Este nuevo contrato viene a sustituir al convenio que para el balizamiento del río Piedras suscribieron en marzo de 2001 la propia APPA, la Autoridad Portuaria de Huelva y los ayuntamientos de Cartaya y Lepe, el cual quedó sin efecto en noviembre 2009.

También responde el nuevo contrato, según la APPA, al cumplimiento de los objetivos del Plan de Usos de los Espacios Portuarios de la Ría del Piedras, entre los que destacan la mejora de las infraestructuras, servicios y equipamientos portuarios del Piedras, sobre todo teniendo en cuenta que dicho lugar está sometido a continuas variaciones de su fisiografía derivadas de la importante dinámica litoral, que obliga a realizar periódicas batimetrías con el fin de adecuar el balizamiento a su realidad física.

El contrato incluirá tareas de mantenimiento preventivo, siendo necesaria al menos una inspección semanal del funcionamiento y emplazamiento del balizamiento; una revisión anual como mínimo del estado de fijación de las boyas, así como de la limpieza exterior de sus ópticas; y todas aquellas tareas necesarias para mantener el balizamiento operativo y en óptimo estado de conservación.

También será necesario un mantenimiento de carácter correctivo que incluye el desmontaje de elementos defectuosos; el rescate del balizamiento desplazado y su reparación y posterior montaje, o cualquier otra tarea vinculada a la completa restitución del servicio como consecuencia de incidencias en el servicio; el desplazamiento intencionado del balizamiento para definir rumbos mejores de las embarcaciones como resultado de las batimetrías que regularmente se efectúan en el río y que en la desembocadura sentido se estiman un mínimo de dos al año; y por último el rescate de buques o retirada de fondeos, muertos, naufragios o cualquier objeto que pudiera localizarse en aguas del río dificultando la navegación.

El nuevo balizamiento, que deberá ser aprobado previamente por la Comisión Naval de Faros, está compuesto actualmente por cinco marcas laterales de babor de color rojo; siete marcas laterales de estribor de color verde; y una marca de 'Aguas Navegables' de color blanco, situada en la entrada de la canal y denominada 'boya de recalada'. Todas las boyas disponen de linternas autónomas tipo LED con paneles solares integrados

No hay comentarios:

Publicar un comentario