La Junta de Andalucía
conciencia a los veraneantes sobre las repercusiones negativas del consumo de
inmaduros y la importancia de la trazabilidad y el etiquetado en todo el
litoral onubense y del resto de la comunidad autónoma. Ampliar foto El delegado
de la Junta de Andalucía en Huelva, Francisco José Romero, y la delegada
territorial de Agricultura, Pesca y Desarrollo Rural, Josefa González Bayo,
acompañados por el alcalde de Punta Umbría, Gonzalo Rodríguez Nevado (PSOE),
han presentado este martes una campaña de sensibilización en el punto de
información instalado en la Plaza 26 de abril de Punta Umbría, ha informado la
Junta en una nota. Todo ello para incidir en el daño biológico que provoca al
medio marino la extracción e ingesta de especies que no alcanzan las tallas
mínimas legales y la importante merma que supone esta práctica para la
sostenibilidad del marisqueo, una actividad profesional de la que dependen,
sólo en la provincia, 600 familias. El mensaje, como ha expresado el máximo
responsable de la Administración autonómica en Huelva, es claro: "Si te
llevas coquinas, te llevas multa".
Durante el año 2014 se abrieron hasta 765
expedientes sancionadores por marisqueo ilegal en la provincia, fruto de las
actuaciones de control que el Servicio de Inspección Pesquera lleva a cabo de
manera regular durante todo el año y que se intensifican durante el verano ante
el incremento de la demanda de pescado por la época vacacional y la fuerte
afluencia de turistas. "Está en juego la rentabilidad del sector y, por
tanto, el empleo que genera, así como la propia salud de los consumidores, en
la medida en que hablamos de productos comercializados sin pasar ningún tipo de
control sanitario previo y que podrían, incluso, estar contaminados por
biotoxinas como la DSP", ha expuesto Francisco José Romero. Ante esta
problemática, según ha expresado Josefa González Bayo, "tenemos que hacer
un llamamiento a la responsabilidad y la sensibilidad de la población, para que
evite la captura de coquina y otros bivalvos en las playas onubenses, para que
dejen esta labor a los únicos que pueden realizarla legalmente, los
mariscadores profesionales, y para que sólo compren en el mercado aquellos
productos etiquetados que cumplen la línea de trazabilidad".
Misión de la campaña Ésta es, precisamente, la
misión de la campaña, que contempla la instalación de un punto de información
itinerante que recorrerá durante el mes de agosto todas las playas y paseos
marítimos de la provincia, desde Punta Umbría (11 de agosto) hasta Isla Canela
(25 de agosto) y Punta del Moral (26 de agosto), pasando por El Portil (12 de
agosto), El Rompido (20 y 27 de agosto), La Antilla (21 de agosto), Islantilla
(18 de agosto) o Isla Cristina (19 y 24 de agosto), sin olvidar Matalascañas
(13 y 17 de agosto) y Mazagón (14 de agosto).
La información se
ofrecerá desde unas carpas en las que monitores especializados ofrecen
información a los consumidores y se desarrollarán talleres dirigidos a la
población infantil sobre la importancia del etiquetado y la trazabilidad de los
productos pesqueros, que aportan datos útiles como la procedencia y las
características de los alimentos. La delegada territorial de Agricultura, Pesca
y Desarrollo Rural, ha señalado que el objetivo es "impulsar un cambio de
actitud necesario". Para ello, se realizarán hasta 75 actuaciones en toda
Andalucía, donde se repartirán, además, 9.000 folletos de inmaduros, 7.500 con
información de la coquina, 10.000 ictiómetros y 7.000 recetarios, algo a lo que
se suma material complementario de las empresas encargadas de los talleres.
Presencia de bioroxina Dentro del litoral onubense, la captura y
comercialización de la coquina sólo está permitida en estos momentos —en
exclusiva, por parte de los mariscadores con licencia profesional— en las zonas
de producción de la Barra del Terrón y el espacio marítimo de Doñana. En el
resto del caladero de esta especie —Isla Canela, Desembocadura del Piedras,
Punta Umbría, Mazagón y Matalascañas— se halla prohibida la actividad como
consecuencia de la presencia de la biotoxina DSP y los consecuentes riesgos que
su ingesta conlleva para la salud pública. La extracción de la chirla, por su
parte, cuenta con luz verde en las aguas de Isla Canela, la Barra del Terrón,
Punta Umbría y la zona marítima de Doñana —no está autorizada por la misma
causa que en el caso de la coquina en las de Mazagón ni en las de
Matalascañas—. Las sanciones Josefa González Bayo ha recordado que el marisqueo
sin licencia conlleva una sanción de carácter "grave", calificación
que en el caso de que la actividad se desarrolle en una zona de producción
cerrada por motivos sanitarios se eleva a "muy grave".
Las sanciones por el
incumplimiento de estas prohibiciones pueden oscilar entre los 301 y los 60.000
euros para las personas que capturen moluscos bivalvos sin autorización
(sanciones graves) y entre los 60.001 y los 300.000 euros para quienes
desarrollen esta actividad en un caladero cerrado por la presencia de toxinas
(sanción muy grave).